Nuevos desafíos Viales de la electromovilidad
A partir del 1 de julio de 2021, todos los autos propulsados con tecnología eléctrica en la unión Europea deberán contar con un sistema de alerta ambiental.
La frecuencia mínima deberá ser de 66 decibelios y un máximo de 75
Unión Europea plantea nuevos desafíos viales para la electromovilidad y exige a los fabricantes que los vehículos eléctricos emitan sonido
A partir del 1 de julio de 2021, todos los autos propulsados con tecnología eléctrica deberán contar con un sistema de alerta ambiental. De esta forma, se busca incrementar la seguridad de los usuarios vulnerables de las vías, principalmente de peatones, ante lo silencioso que son este tipo de vehículos en las calles.
Con el objetivo de mejorar la seguridad de tránsito de los usuarios más vulnerables de las vías producto del auge de la electromovilidad en las principales ciudades del Viejo Continente, la Unión Europea estableció que todos los vehículos motorizados que sean propulsados con energía eléctrica y que sean comercializados a partir del segundo semestre de este año, deberán contar obligatoriamente con un sistema que genere un ruido artificial durante sus desplazamientos.
De acuerdo a la nueva norma, que ya entró en vigencia a partir del 1 de julio de este año, todos los autos eléctricos e híbridos que sea vendidos en los 27 países que integran esta comunidad política, deberán emitir un ruido de manera muy similar a los motores a combustión interna, con una frecuencia mínima de 56 decibelios y un máximo de 75, mientras se transite por sobre los 20 Km/Hora y cuando se conduzca en marcha atrás.
Si bien la ausencia de ruido en los vehículos eléctricos se ha transformado en un atributo altamente destacado por ayudar a reducir la contaminación acústica delas ciudades y a bajar los niveles de estrés vial de quienes conducen y han privilegiado esta tecnología, la Unión Europea ha alertado que esta condición supone desventajas para la seguridad vial de peatones, ciclistas y motociclistas al no poder percibir su presencia en las calles. De hecho ,estudios realizados por la propia Comisión Europea indicaron que un transeúnte sólo tiene un segundo y medio para evitar ser atropellado por un vehículo eléctrico que se localice a ocho metros y que circule a sólo 30 Km/Hora.
Otras de las decisiones que justificó la Unión Europea para introducir esta obligatoriedad en los vehículos eléctricos nuevos, es que la reducción del ruido en el tránsito ha eliminado una fuente importante señal acústica de aquellas personas que presentan discapacidad visual o auditiva, lo que podría poner en riesgo su integridad dentro del sistema vial.
La inclusión de un Sistema de Alertas Acústicas a Vehículos (AVAS), como es conocido mundialmente este dispositivo, es sólo un adelanto de una serie de medidas en materia de seguridad que introducirá la Unión Europea. Durante el 2022, se proyecta que todos los vehículos eléctricos que se comercialicen en ese continente deberán contar con un sistema de frenado automático de emergencias; asistencia en caso de abandono de pistas; asistentes de velocidad inteligente; advertencia de somnolencia y de distracción del conductor; cámaras y sensores en la parte trasera para la marcha atrás, y un registrador de datos en caso de ser protagonista de un siniestro vial.
